El informe STEO de la AIE de agosto nos muestra que la producción de petróleo de EE. UU. en 2023 puede ser más alta de lo esperado anteriormente. Anteriormente se esperaba un aumento de 800.000 b/d con respecto a 2022, y ahora se espera que suba 900.000 b/d a 12,8 millones de barriles por día. Si es así, esta sería la producción más grande registrada.
Resultados del petróleo este #09Ago:
— Finanzas Digital (@finanzasdigital) August 9, 2022
⭕️Texas (WTI): USD 90,50 ???? (0,3%).
⭕️Brent: USD 96,31 ???? (0,30%).
De ahí el probable retroceso de los precios en las últimas decenas de minutos. El repunte anterior, a su vez, estuvo relacionado con el recorte de las exportaciones a la República Checa, Eslovaquia y Hungría desde Rusia. Teóricamente, se supone que las exportaciones se restablecerán si se resuelve el problema de pagar el tránsito.
Mientras tanto, se han planteado dudas sobre los últimos informes de EIA. Por supuesto, es difícil cuestionar la credibilidad de una institución de este tipo, pero en el pasado ha sucedido muchas veces que las estimaciones y los pronósticos se revisaron claramente más tarde. Este puede ser el caso no solo con el pronóstico STEO (el gasto de capital de las compañías petroleras es el más bajo en muchos años), sino especialmente con los datos de demanda semanal.
Ha habido especulaciones de que los datos están "hechos a la medida" para la presión a la baja sobre los precios del combustible, y que en el futuro los datos mensuales revisarán los datos semanales incorrectos. Sin embargo, por el momento, prevalece la narrativa de la caída de la demanda, por lo que no es imposible que los precios encuentren su fondo un poco más bajo.
El precio ha caído claramente, aunque teóricamente se puede esperar alcanzar la zona de los 90,5, donde el precio se consolidó durante la sesión asiática anterior.
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