La disparidad de comportamiento entre percentiles de consumo de carburantes se acentuó a raíz del aumento de precios; los que gastaban menos en carburantes redujeron más su consumo


La conclusión de los análisis de Caixabank es que la disparidad de comportamiento entre percentiles de consumo de carburantes se acentuó a raíz del aumento de precios, con una reducción notable del gasto en los percentiles más bajos y una subida sustancial en los más altos.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) pierde un abultado 3,9 %, hasta los 85,61 dólares el barril, acumulando una pérdida semanal del 7,58 %. pic.twitter.com/I4KG6d7azk
— EFE Noticias (@EFEnoticias) October 14, 2022
Así, los que gastaban más en carburante en 2019 seguramente han tenido menos capacidad de ajustar la demanda en 2022 porque se trata de un gasto más imprescindible (por ejemplo, porque su trabajo exige mayores desplazamientos) o disponen de una mayor capacidad para absorber el aumento de precios.
Sin embargo, los que gastaban menos en carburantes redujeron más su consumo, bien realizando menos desplazamientos o sustituyendo el vehículo propio por el transporte público. Reacciones muy dispares ante el mismo aumento de precio de los carburantes.